“Conocer al Único Dios Verdadero, honrarle y obedecerle, y darle a conocer.”
The People of the Book ha adoptado una estrategia única/original para alcanzar a los musulmanes. Reconocemos que hay muchos principios valiosos tanto en el movimiento “insider” como en la metodología histórica tradicional, siempre y cuando son implementados dentro del marco bíblico. Queremos evitar extraer a los musulmanes de sus redes relacionales naturales hasta donde sea posible. A la vez, sí queremos extraerlos de una teología de la salvación por obras. Deseamos que lleguen a tener la fe salvadora en Cristo sin abandonar sus redes personales. Así podrán compartir a Cristo con su familia, sus amigos, y el resto del mundo musulmán. Esta extensión del Evangelio tiene gran potencial, especialmente si puede fluir por la comunidad local de tal manera que conserve una identidad natural y genuina dentro de ese contexto particular. El mensaje del Evangelio no cambia nunca. Es preciso guardarnos de cualquier forma de sincretismo (mezclando creencias, principios, y prácticas de varias religiones que resulta en un mensaje corrompido). Tanto el movimiento “insider” como la metodología histórica tradicional han hecho contribuciones importantes a las misiones mundiales. Podemos aprender de ambos. Los dos han dejado huellas positivas y negativas. Aun así, nuestro fundamento y plan de acción tiene que basarse siempre en las Escrituras.
Respecto a la escala C1-C6, desarrollada por John Travis, hay dos tipos de enfoque:
- un enfoque cultural (C3-C4)
- un enfoque socio-religioso (C5) Ambos enfoques intentan permanecer conectados de alguna manera con la communidad musulmana.
John Travis explica la escala de la siguiente manera:
“La escala C1 – C6 compara y hace contrastes entre diferentes tipos de comunidades que están centradas en Jesucristo (grupos de creyentes en Cristo) que se encuentran en el mundo islámico. Los seis diferentes tipos de comunidades se distinguen por su lenguaje, cultura, formas de alabanza, libertad en reunirse, y su identidad religiosa. Todos reconocen a Jesús como Señor, y todos comparten los mismos elementos principales del evangelio. La escala intenta describir la diversidad enorme que existe en el mundo islámico en cuanto a etnicidad, historia, tradiciones, lenguaje, cultura, y, en algunos casos, teología.  Tal diversidad requiere implementar diferentes estrategias para poder alcanzar al mundo islámico con el evangelio y plantar comunidades Cristo-céntricas entre los más de mil millones de seguidores del Islam. El propósito de la escala es el de ayudar a obreros a determinar cuál tipo de comunidad centrada en Cristo podría funcionar mejor en un contexto particular, y así ser utilizado por Dios para salvar al mayor número posible. Todos los seis tipos de comunidades existen actualmente en el mundo islámico.” (Evangelical Missions Quarterly (October, 1998): 407 – 408)
RESUMEN DE LAS SEIS COMUNIDADES
- C1 Misioneros establecen una iglesia que es básicamente idéntica a su iglesia de origen. Los cultos se llevan a cabo en el idioma de los misioneros. Los creyentes se identifican como cristianos. Hay poca conexión con la cultura local.
- C2 Igual que C1, con la excepción de utilizar el idioma local en los cultos.
- C3 Han incorporado varias formas culturales no religiosas de la región donde ministran (como modo de vestir, arte, etc.) Rechazan totalmente cualquier elemento puramente islámico. Se reúnen en un edificio eclesiástico tradicional o a veces en un lugar más neutral. Se identifican como cristianos, pero intentan mantener de alguna manera una presencia más contextualizada.
- C4 Éstos son semejantes a los de C-3, pero han adoptado algunos elementos islámicos en su comunidad (como no consumir puerco, orar con un estilo más islámico, usar vestimento islámico, y utilizar términos islámicos). Se identifican como “Seguidores de Isa” o algo parecido. Normalmente no se reúnen en un edificio eclesiástico tradicional. La comunidad musulmana no los identifica como musulmanes.
- C5 Retienen su identidad legal y social en la comunidad musulmana. Descartan o reinterpretan cualquier práctica o doctrina islámica que contradice la Biblia. Algunos asisten regularmente a la mezquita y otros no. Comparten su fe en Cristo regularmente con los musulmanes de su comunidad. Se identifican como musulmanes que son seguidores de Isa, o simplemente musulmanes. Otros de la comunidad musulmana pueden verlos como musulmanes un poco raros. 
- C6 Mantienen su fe en Cristo en secreto porque existe una amenaza de severa persecución, sufrimiento, retaliación legal, o muerte. Algunos se reúnen secretamente en grupos pequeños. Normalmente no comparten su fe en Cristo abiertamente y conservan una identidad 100% musulmana.
Los obreros cristianos entre musulmanes necesitan evaluar cuál o cuáles de estos enfoques pueden ser mejor utilizados por Dios en el contexto particular en el cual se encuentran.
Si realmente buscamos tener un ministerio eficaz dentro del mundo musulmán, es imprescindible, en un sentido bíblico, llegar a ser como musulmanes en el mundo musulmán. La meta es compartir el Evangelio de tal manera que sea comprendido y recibido de todo corazón y con toda la mente. Si no pasamos tiempo con ellos, viviendo entre ellos, ¿cómo podrán observar el Evangelio en acción a través de la vida real?
John Gilchrist comenta lo siguiente en su libro Communicating the Gospel to Muslims (part B – The Biblical Approach to Muslims, section 3 – Paul’s preaching at Athens and Corinth):
“Cuando los cristianos han tomado un método tradicional como lo han hecho generalmente en el Oeste, simplemente presentando a Jesús como Señor y Salvador de todos los hombres, los musulmanes experimentan seguridad y protección al descartar ese mensaje como una exposición de doctrinas y creencias de gente extraviada. Y, a la vez, encuentran consuelo en refugiarse en las doctrinas y prácticas del Islam. Es necesario buscar cómo penetrar su fortaleza ideológica. Es necesario retar su pensamiento y guiarles a reflexionar en el contenido genuino del Evangelio, llevándoles a reevaluar el punto de vista grabado en ellos acerca de Jesús y la historia profética que apunta a Él.
Además de eso, como hemos visto en el ejemplo de Pablo, tenemos una licencia clara en la Biblia para citar obras de ellos y así hacer nuestro mensaje más relevante. Pablo hizo eso en Atenas cuando citó poetas griegos. Es asombroso observar cómo el Evangelio llega a tener más relevancia cuando un cristiano cita pasajes del Qur’an al compartir la verdad de la Biblia. Voy a dar varios ejemplos prácticos de eso más adelante en este libro. Por el momento, déjame enfatizar que tenemos la clara autoridad de la Palabra de Dios en utilizar este método.”
El Sr. Gilchrist dio otro comentario en section 4 – Becoming a Muslim to the Muslims:
“¿Cuál, pues, es la manera bíblica de ministrar a los musulmanes, tomando en cuenta este método al que el apóstol Pablo nos introduce? Es sencillamente esto: así como él se hizo partícipe del mundo judío para alcanzar a los judíos, nosotros podemos participar en el mundo musulmán para alcanzar a los musulmanes. Tenemos que descubrir las creencias de los musulmanes. Tenemos que entender cómo perciben la historia profética y su concepto en cuanto a Jesús. Hay que entender su percepción general de la vida y su relación con el Islam. Al hacer esto, tendremos la oportunidad de presentar el Evanglio en una manera que facilitará que capten el mensaje verdadero, y no un mensaje distorcionado. Samuel Zwemer, uno de los más reconocidos misioneros que ha ido a compartir con los musulmanes, ha expresado todo esto perfectamente:
‘Tenemos que ser musulmanes a los musulmanes si queremos ganarlos para Cristo. Tenemos que llevar esto a cabo en el sentido Paulino, sin ceder nada de nuestro mensaje. Hay que llevar esto a cabo con compasión sacrificial y amor sin egoísmo. El misionero cristiano, en primer lugar, debe conocer íntimamente la religión de los que quiere alcazar para Cristo. Ignorancia del Qur’an, de sus tradiciones, de la vida de Muhammad, el concepto islámico de Cristo, sus costumbres y prejuicios que han resultado del Islam… la ignorancia de todo eso es la dificultad principal en trabajar con musulmanes. (Zwemer, The Moslem Christ, p. 183).’”
Estamos convencidos de que es muy efectivo utilizar el Qur’an como una herramienta para crear un puente entre conceptos en los cuales han sido adoctrinados, y conceptos bíblicos con los cuales no han sido del todo familiarizados. Hay conceptos en el Qur’an que hasta apoyan la verdad de la Biblia y pueden interesar al musulmán a estudiar “las Escrituras que descendieron de Alá antes de Muhammad.”
¿En realidad debemos dedicar tiempo al estudio del Qur’an? Al fin y al cabo no es la Palabra de Dios. James White ha afirmado que sí debemos dedicar tiempo a eso en su libro, What Every Christian Needs to Know About the Qur’an. Nosotros de The People Of The Book recomendamos sin reservas este libro que ofrece una cuidadosa y precisa investigación del Qur’an. El Dr. White hace la siguiente observación en cuanto al porqué un seguidor de Jesús debe esforzarse y familiarizarse con las enseñanzas del Qur’an:
“¿Por qué leer un libro entero sobre las enseñanzas principales del Qur’an en relación con la fe cristiana? Para los que son seguidores de Jesús, la respuesta es clara y sencilla: Nosotros deseamos honrar y glorificar al Dios quien nos ha concedido la vida, la redención, el perdón, y la paz. Los que han sido redimidos anhelan contar a otros del Redentor. Compartimos este planeta con más de mil millones de musulmanes y debemos anhelar presentarles a Nuestro Señor. Un conocimiento preciso del Qur’an puede ayudar a abrir puertas para esas conversaciones. También ofrece un fundamento de entendimiento para poder comunicar claramente y comprender la posición islámica.”
Por supuesto, la Santa Biblia es la única autoridad completa y suficiente para la doctrina y la vida.
Creemos que es completamente aceptable utilizar el nombre “Alá”, tanto en la Biblia que usamos para ministrar a musulmanes como en los materiales que distribuimos. Es la traducción de la palabra “Dios” en árabe. Joshua Massey ha escrito un resumen excelente sobre esto.
Debemos aclarar que NO estamos diciendo que Alá en el Qur’an es exactamente igual a YHVH en la Biblia.
No nos avergüenza la frase “Hijo de Dios”. Es una frase que Dios mismo ha elegido utilizar en la Biblia y no vamos a discutir con Dios sobre eso. Sí, es cierto, que hay que ayudar a los musulmanes a entender lo que esa frase significa, pero de ninguna manera abogamos por cambiar la frase por otra. La Biblia la usa con una frecuencia abrumadora. Desgraciadamente, muchos cristianos probablemente nunca han reflexionado a fondo en el significado de esta frase tan importante. Se puede leer mucho más sobre este tema en:
versículos relacionados con la frase “Hijo de Dios”
el uso de la frase “Hijo de Dios” en Romanos 1:4
Ora con nosotros para que Dios levante a hombres y mujeres musulmanes con una fe verdadera en Cristo, que tienen un compromiso firme de compartir el Evangelio del Señor Jesucristo en el contexto de su propia comunidad.
Les rogamos que oren por nosotros regularmente.
“Perseverad en la oración, velando en ella con acción de gracias; orando al mismo tiempo también por nosotros, para que Dios nos abra una puerta para la Palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también he sido encarcelado,” Col. 4:2-3